Hola a todos,

Esta es la página de un médico de familia "cabreado" que se ha convertido en delincuente de la noche a la mañana por intentar hacer lo mejor posible su trabajo y querer conservar su independencia... si si sí un FUNCIONARIO, aunque en los tiempos que corren parece ser mejor ocultar este dato...

Mi aspecto pretendo que siga siendo un enigma para vosotros, pero todos los contenidos son 100% mios, o al menos comparto completamente la opinión del autor.

ESPERO VUESTROS COMENTARIOS.

miércoles, 20 de julio de 2011

Cavando la propia tumba

Hace unos días fui a visitar a un paciente a su domicilio fuera del horario laboral. Actualmente soy el único facultativo del centro en mi turno de trabajo pues estamos al 50% de la plantilla (no se suple a nadie). Se ha doblado el trabajo y fue imposible dejar el centro sin asistencia.

Últimamente me siento más “primo” que nunca. Trabajo el doble por un 9% menos del sueldo (sí, sí, a estas alturas ya llega a esa cifra aunque se continua repitiendo que es un 5%, ¡cuando nunca lo fue!!!!). No soy yo solo, todos los médicos de familia estamos en una situación parecida. Sin ir más lejos la coordinadora del área a la que pertenece mi centro de salud acudió a una visita domiciliaria cuando ya estaba en su casa… Así pues que tengamos que oír al presidente de la CEOE decir lo que tuvo el valor de decir ayer me parece como mínimo una falta de respeto. Nada original pues somos el saco habitual de los golpes de algunos políticos y fauna afín. No por ello me parece menos lamentable que para mucha gente TODOS los trabajadores públicos seamos considerados unos vagos y la personificación de la ineficiencia.
Creo que tenemos un serio problema y NOSOTROS MISMOS SOMOS PARTE DE ÉL. Y digo esto porque los médicos (concretamente los especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria) seguimos sacando las castañas del fuego a los consellers de turno que no dudan en ponernos verdes a la mínima ocasión. Que si no cumplimos el horario, que si somos peseteros,… no perdón, ¡somos un chollo!!!!.

Siempre he dicho que el sistema sanitario catalán es muy mejorable. Creo que el bombo de que “somos uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo” es fundamentalmente falso. Es la excusa para no tener que acometer los cambios necesarios y que demanda la atención del siglo XXI: falta coordinación entre especialidades, se ha de potenciar de una puñetera vez la atención primaria (hasta ahora han sido solo palabras), favoreciendo la aplicación de criterios de excelencia clínica reales (la palabra excelencia se ha utilizado en exceso sin llegar a cuajar en propuestas concretas que repercutan en la asistencia a los pacientes),… y un largo etcétera. Son necesarios cambios profundos pues el sistema realmente no es eficiente. Se ha de acometer una reforma donde estén implicados todos los agentes, también los usuarios. Desde mi punto de vista pasa por invertir más y mejor el dinero, no en recortar indiscriminadamente… se pierde dinero pero no siempre en la atención directa a las personas. Recordar que el gasto sanitario per capita es de los más bajos de la UE, en parte por los bajos salarios de los profesionales. ¡Perdón!!! se me olvidaba que no podemos hablar de dinero… pues somos un colectivo que tiene pudor de hablar de su remuneración. ¡Como si la vocación fuese suficiente para pagar la hipoteca!. Estamos divididos desde hace demasiado tiempo y esto nos ha hecho débiles y seguimos sin tener una voz única que enfrentar a este disparate que se sigue perpetrando de forma cobarde con la impunidad y la constancia de los días.

Y digo que somos parte del problema porque seguimos “tragando”, probablemente porque nos gusta nuestro trabajo, o porque pensamos en los pacientes,… o una combinación de muchos factores, donde también está el sentimiento de inferioridad que presentamos de forma crónica especialmente el colectivo de médicos de familia. Se nos sigue considerando médicos de tercera incluso por nuestros propios compañeros que trabajan en el hospital (¿continuo asistencial?). En un colectivo tan grande hay personas con las más variadas motivaciones, pero yo conozco muchísimos profesionales que no representan en absoluto al funcionario que pinta el “Sr.” Juan Rosell.

Que razón tiene el Sr. Albert Novell en su artículo de opinión en el Diario Médico del pasado 18 de julio cuando señala “la falta de estima que la sociedad tiene hacia el profesional sanitario”, pues aunque somos valorados en general con buena nota por los ciudadanos seguimos siendo vistos como unos privilegiados que trabajan lo justo… en mi opinión esto no se ajusta a la realidad, al menos no a la realidad de la Atención Primaria en Catalunya y creo que en parte es culpa de los propios profesionales que seguimos cargando con todo y esto es aprovechado por los diferentes gobiernos que padecemos pues “cuela” todo.

lunes, 18 de julio de 2011

Ja va sent hora...

Hi ha uns 34500 metges que treballen a Catalunya segons dades del INE del 2010. Som molts. Molts que treballen a la sanitat pública i molts que treballen a la concertada i la privada. Som molts i amb molts diferents punts de vista. Segurament ser tants és la nostra força i alhora la nostra feblesa doncs mai hem aconseguit tenir una veu única i d’això s’han aprofitat els diferents gestors que hem tingut en aquets anys i que han buscat separar-nos, fent del “divide y vencerás” un arma habitual.
Així doncs resulta que som un colectiu totalmente disgregat tot i tenir fama de coorporativistes… han hagut molts canvis i hem deixat de ser els Senyors Metges (alguns ho troben a faltar), i ens hem convertit en treballadors públics (en els millors dels casos) i en els “sospitosos habituals” responsables de tots els mals del país pel desmesurat gasto públic que suposa la sanitat (tot i ser el més baix de la Europa dels 15 !!!!!!!!).

Escric tot això perquè em considero un metge vocacional i ja sabía que no em faria ric fent aquesta feina, però tampoc vaig fer vot de pobressa ni vaig signar cap clausula perquè em prenguessin pel “pito del sereno”. Ara ens retallen com ninos de cartró (como Mariquita Pérez) i ens volen fer passar per l’aro perque saben que no som capaços de tenir una veu única. No confiem en el Col·legi de Metges, en els sindicats,…i per suposat en els polítics…  cada un va a la seva... Entre tants professionals hi ha qui pensa que la privatització que s’aveina ens pot afavorir (crec que van errats, doncs les mútues controlaran tot el fotut negoci) i ha d’altres que estan resignats des d’abans de començar a lluitar,… tot l’espectre que ens podem imaginar.

Com comenta una companya, la privatització (desregulació en aquest llenguatge polític que s’obstina en utilitzar eufemismes), ja està apamada i ara sols ens queda saber si colaborem o estem en contra. Jo personalment he triat clarament la segona opció (potser tinc una idiològica massa marcada, com si els que es volen carregar el sistema social que tenim, imperfecte i millorable, fossin purs d’esperit, quins collons !!!!). Crec que ja es hora de donar una resposta ferma i unida, com a professionals i com agents socials, i que tot i les nostres diferències fem sentir la nostra veu davant de la sèrie de barbaritats que s’obstinen en perpetrar. Potser una resposta inicial de tots els metges de Catalunya és imposible, però perquè no comencem per Mataró? Tant de bó después sigui tot el Maresme…

Si continuem limitant-nos a treballar (com fins ara), aquests que es diuen ells mateixos els millors, ens continuaran faltant al respecte i ens passaran per sobre. Ja es hora de “perdre” el temps parlant. Encara que sigui sols un terç …